- Una de las cosas más divertidas que nos hemos encontrado al navegar diariamente por webs de baile y diversas redes sociales es esta publicación:
Las 7 verdades de un salsero
¿Lo has visto ya? ¿Te has sentido identificado con alguna o quizá con todas?
Repasemos una por una y veamos con cuál o con cuales te identificas 😉
1. Tus amigos y familia ya están «Hasta el gorro» de escucharte hablar todo el tiempo de Salsa…
… O de las últimas hondas de la bachata sensual, o de los pasos más actuales de la bachata tradicional o del baile social de kizomba que tuviste el finde pasado en alguna de las múltiples sesiones latinas que hay por doquier… ¿A qué si?
2. Eres un «Zombie» en la oficina, porque la noche anterior fuiste a bailar …
El típico escenario:
Jueves 9am. Tú llegando a la oficina.
– Oye, Pepe ¿Estás bien? Traes una cara…
Tú: – Qué va hombre, que ayer salí de la clase de bachata y los compis me empujaron a las nuevas sesiones de salsa y bachata que han abierto en la disco a la que siempre vamos…
– Joder, pero tú no paras!
Hacia el final de la tarde, te llaman al móvil los mismos compis de clase:
– Pepe, que vamos a la sesión de kizomba de hoy ¿Te apuntas?
Tú: – Que va, que va, tengo que descansar tío…
Viernes 9:30h. Llegando tarde a la oficina. Gafas de sol. Das los buenos días con tono discreto, intentando no llamar mucho la atención. Taza de café. Directo a la silla. Pasas todo el día pensando en que no volverás a salir de fiesta entre semana …
3. Practicas tus giros cuando crees que nadie te está mirando
Esta es una de las verdades más divertidas que hemos visto. Iba el otro día una chica en el metro, esperando el tren con los cascos puestos. Mientras esperaba, con cierta timidez y como si nadie la estuviera mirando, hizo un básico y se giró. Luego se dio cuenta de que otros estábamos observándola y como si no hubiese pasado nada continuo escuchando música.
4. Clases de salsa, bachata, kizomba y las salidas a bailar se integran a tus gastos del mes
Abres tu excel mensual y cuentas:
Gastos fijos mensuales:
Piso
Comida y servicios
Teléfono
Clases de salsa, bachata, kizomba
Reserva para salidas (mínimo 1 a la semana)
Hucha para comprar aquellos zapatos de baile que ya le he encargado al profe
Hucha para el full pass del viaje de verano con los compis de salsa
5. Le pides ayuda a la secretaria, o a tu compañero de trabajo para practicar tus pasos
Le pides ayuda a la secretaria, o a tu compañero de trabajo … O incluso a tu compañero de piso, que no tiene ni idea de baile, para practicar tus pasos:
– Ey, Jose, ¿Estás dormido? ¿Estás ocupado? ¿Me hace un favor?
– Sí, claro, dime…
– Ponte frente a mí y haz lo siguiente, sólo necesito mirar si este paso me sale bien …
– Venga, Mari, ¿otra vez yo con esto? No tengo ni idea …
– Pues, apúntate a clases de baile, ¡Te invito! 😀
6. Decidiste que la persona con la que te casarás tiene que saber bailar salsa, bachata, kizomba, merengue…
Pues sí, ¡Verdad verdadera!
Una vez que aprendes a bailar y que adoras bailar, no concibes tu vida sin el baile. Tu pareja debe saber bailar, porque sólo así entenderá que:
- Bailar con toda la discoteca no quiere decir que estés ligando con alguien más, por ejemplo.
- Que las hondas de la bachata sensual o la coquetería del chico o de la chica son parte del baile.
- Que los mejores días para salir son los miércoles, jueves o viernes porque es cuando las pistas de baile van a tope para salseros, bachateros y kizomberos.
- Que en verano viene el congreso de salsa, bachata o kizomba que tanto te interesa y que hay que empezar la hucha pronto para comprar el full pass.
7. Dices que comprarás ropa para tu trabajo, pero secretamente buscas ropa con la que te veas bien cuando bailas.
A todos nos pasa, pero el caso más típico es el de las chicas. Cuando bailas, la decisión más inteligente que se puede tomar en la vida es comprarte ropa que vaya bien para el trabajo, pero que también vaya bien para ir a bailar. Es como matar dos pájaros de un tiro.
Y esto no termina aquí, lo siguiente es que esos días de la semana que sabes que puedes irte a bailar después del trabajo, te vistes pensando en ello, llevas los zapatos de baile en el bolso, y algún atuendo extra sólo para estar lista en caso de salir de fiesta.
No importa si te mueves en coche, en metro o en bus. La fiebre del baile no tiene límites y siempre encontramos la forma de apañarnos.
Dicho esto, ¿Te has sentido identificado?
Es que el mundillo del baile nos atrapa, nos enamora. Hay un antes y un después de bailar. Te apuntas a clases, conoces gente, empiezas a salir, cada día te va gustando más, conoces lugares increíbles para bailar, conoces nuevos cantantes y orquestas … Y cuando mirar a tu alrededor ¡Es parte de tu vida! ¡Ala, que bailar es lo mejor que me ha pasado!
En u!dance vivimos el baile de esta forma, por eso es que vamos todo el rato reinventando nuestras clases, invitándote a bailar, disfrutar y conocer gente con nosotros, buscando eventos para que participes y vivas esta gran experiencia.
Si aún no lo has vivido ¿qué esperas? ¡Te estamos esperando!